0903 Spam

Hacía más de un año que intentaba hablar con Cherry, pero apenas la contactaba lo bloqueaba. No había forma. Había vuelto a las redes con identidades secretas, pero sólo para chatear con reclusos domésticos como él en otras partes del mundo. Su red social favorita era Find a grave. En esos casi dos años sin que nadie le prestara atención había sumado varios autodiagnósticos: fobia social, trastorno de la personalidad por evitación, trastorno de despersonalización, trastorno por déficit atencional principalmente inatento y depresión atípica. Había reemplazado todos sus proyectos y conspiraciones por una obsesión con la crónica policial.

Seguían matando a estrellas de las redes. A María Fernanda, Felicitas y los roleros se les sumaban un estudiante de Filosofía, una activista por el trabajo sexual y un bloguero profesional con acusaciones de abuso. Influencers de todas las edades y de todo el arco político estaban en peligro sin tener más en común que el registro de sus muertes en las redes. A su vez, los sospechosos no tenían conexión entre sí ni con sus víctimas. Los únicos acusados estaban muertos: a Irene la evidencia la comprometía en el crimen de María Fernanda, a quien no conocía. El ex policía Juan Pablo Bonfiglio, dueño del arma que mató a los roleros, se suicidó cuando se vio acorralado. Tampoco los conocía. Y el resto de los crímenes no tenía sospechosos.

Mientras tanto, la mayoría de los niños fantaseaba con ser youtuber antes que cualquier otra carrera u oficio.

Como Irene, el ex policía Bonfiglio tampoco conocía a sus víctimas, pero pasaba su vida en las redes. Se le encontró un canal en youtube, No Podrán Acallar La Verdad, con cientos de videos de producción casera. Los primeros lo mostraban en su faceta de comentador político psicótico, hasta ahí nada fuera de lo común, pero poco a poco había espiralado hacia la autodestrucción. Estaba convencido de que la Justicia corrupta lo había condenado a protagonizar un reality show contra su voluntad y hasta sus familiares eran cómplices. Cámaras ocultas hasta adentro del baño, mensajes cifrados a su alrededor. Tres bocinazos, cinco estornudos, la vecina vestida de verde. Todo le hablaba. Los últimos videos eran inclasificables, a caballo entre la paranoia y el arte externo, divagues sin sentido, con menos de diez vistas cada uno, pero con miles de comentarios indescifrables que se hacía a sí mismo, repetidos en miles de combinaciones tipográficas. El descenso hacia la incoherencia se pronunció unas semanas antes del tiroteo.

No había ninguna hipótesis satisfactoria. No faltaba la opinión de que no había conexión detrás y se trataba de una psicopatología emergente del mal uso de internet. Lo que fuera que estaba ocurriendo, una secta, una operación psicológica supranacional, una intoxicación a través de la red de agua o un grupo criptoterrorista, se estaba manejando sin un rastro digital identificable.

Román estaba obsesionado. Había llenado la casa de tableros de detective. Fotos de todos los involucrados, impresiones de portales de noticias, mapas, palabras clave pinchadas en el corcho. Y en el centro de la cuestión, una silueta oscura con un signo de interrogación. Tenía los hilos de colores listos para revelar las conexiones, pero no aparecían. Los involucrados eran islas sueltas. Si había algún dato útil en los archivos públicos que habían dejado en las redes, Román era un mero mortal incapaz de minarlo. Ni siquiera sabía qué estaba buscando. Necesitaba un algoritmo. Calentó el café. Tenía que haber algo que no estaba viendo, pero literalmente no había más opciones. Estaba completamente perdido en el caos. En un ataque de frustración, tiró todos los útiles al piso y se arrepintió al instante. Se puso a juntar: clips, microfibras, resaltadores, cinta adhesiva, marcadores, tarjetas y papeles. Estiró el brazo bajo la biblioteca para recuperar la lapicera de pluma que había rodado hasta ahí. Agachado, quedó frente a la caja del prototipo abandonado de su videojuego de mesa, que habría sido la primera aventura gráfica en papel de la historia. La abrió y encontró el filtro de acetato, las tarjetas de acciones, las libretas para las grillas, los escenarios y los inventarios. Distribuyó los materiales por el piso y los contempló con detenimiento. No sólo el código era autoevidente, sino que sabía exactamente qué pasos seguir por el simple hecho de ser el diseñador de la experiencia. Entonces reflexionó: si los crímenes tenían una lógica interna, era posible que tuvieran un diseñador externo. Tenía que volver al comienzo de todo. La noche del crimen de María Fernanda.

Román dibuja el laboratorio secreto de Flü en una cartulina y le habla a Cherry sin parar. Ya ha cubierto la economía de la atención, el vaporwave, la parapsicología y las invocaciones demoníacas en los cassettes de Xuxa. Ahora cree estar contándole sobre la vez que escuchó por primera vez un fantasma, pero a esa altura Cherry ya está dormida en el sillón, vencida por el hartazgo. Él no se da por enterado y sigue: en 1860 Léon Scott, un librero y lingüista francés, graba la primera voz de la historia sin saberlo. Su obsesión con ver la forma del sonido lo impulsa a inventar el fonoautógrafo, un artilugio diseñado con el oído humano como modelo, capaz de trazar las oscilaciones del sonido en papel, sin imaginar que un siglo y medio después un grupo de investigadores logrará reconvertir las imágenes en ondas acústicas y descubrir el secreto de su voz cantando “Au claire de la lune / mon ami Pierrot”, una canción de cuna. Cherry grita. Tira patadas al aire dormida y se sacude en el sillón. “¡Andate a la puta que te parió, Marisa! ¡Gangosa de mierda!”.

Román volvió al presente y con un marcador rojo en mano escribió “Marisa” en una tarjetita y la pinchó en el corcho. ¿Sería ella la conexión? ¿Quién era? ¿Por qué Cherry había negado a Marisa? ¿Qué no estaba viendo? Era momento de zambullirse en innertte.

Primero apuntó al blog personal de Irene. Buscar: Marisa. Click. El corazón se le salió del pecho. Decenas de resultados. Leyó con atención todas las menciones, pero era una falsa alarma. Sólo era spam con estafas para trabajar desde casa. Salió del blog. Encaró el canal de youtube del ex policía, pero sabía que había cientos de videos de hasta una hora de duración y no había búsqueda posible. ¿Por dónde empezar? Se puso a ver un video al azar del 2014 en el que opinaba sobre operaciones de contrainteligencia en los medios locales, pero era una pérdida de tiempo. Volvió más cerca en el tiempo. Video titulado “20150912_135549_440.avi”.

La cámara apunta fijo a un rincón. Alguien gruñe fuera de campo. Silencio. Más gruñidos. Silencio otra vez.

El video continuaba así. Era inútil. Era hora de abandonarlo. Deslizaba la rueda por las glosolalias que el asesino de los roleros se autocomentaba… Caracteres, palabras y frases al azar. Eslogans obsoletos encadenados en poemas accidentales:

eSsss sentirr DE verDAD

ES SENTIR

LA PUra VerdAD

lapuraverdad

Las idiosincracias revelaban que tipeaba los comentarios uno por uno. A veces los copiaba de otros usuarios, otras retipeaba párrafos de sitios no relacionados, e incluso había llegado a reproducir spam mal traducido.

* LIBERA TU MENTE!! Soy Marisa Castillo, mamá soltera y Estoy ganando $ 97 por hora trabajaro desde casa. Me sorprendió enormemente al misMo tiempo que mi mejor amiga me aconsejó que cambiara a un promedio de noventa y cinco dólares, sin embargo, veo cómo funciona ahora. Experimento la libertad de masas ahora que soy mi jefe. eso es lo que hago . el potencial es INFINITO ...... *

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¿Spam? ¿Podía ser? Volvió al blog de Irene: Marisa. Libera tu mente. Irene y el ex policía Bonfiglio conectados por el spam a la vista de todos. Rastreó el texto y encontró el mismo comentario repetido en cientos de comentarios de youtube, blogs y tweets, siempre con variaciones tipográficas. El más viejo databa del 2014, y aparecía en un tumblr abandonado de Cherry Fix.

Se armó de coraje e hizo click en el vínculo. La URL redireccionaba a la web de ILVEM. Una entrada de blog del fundador Horacio Krell fechada dos años en el futuro.

https://ilvem.com/aplicaciones-asesinas-en-internet/

APLICACIONES ASESINAS EN INTERNET

Diciembre 16, 2019

No se trata de hackers que atacan las páginas web, aunque por suerte existen estrategias defensivas y de la muerte digital se puede resucitar. Nos referimos al asesinato virtual de las empresas e individuos del viejo universo atómico (el de los átomos) en manos de operadores digitales que pululan por internet.

Así como el estribo cambió la estrategia militar en el medioevo y la revolución industrial atrajo al campesino a la fábrica, hoy la crisis se desarrolla en el ciberespacio.

El mundo cambió hacia la tercerización porque: internet se generalizó, los chips mejoraron al 100% anual sin variar su costo, la fibra óptica trajo la supervelocidad de proceso, creció la navegación hasta lograr economías de escala, los costos se desplomaron con la digitalización. Según el Ministerio de Trabajo de EE UU, en el 2005 el principal empleador será uno mismo, como derivado de la economía de la información.

El peligro no es virtual. Hay menores de 30 años que internalizaron la cultura digital, mezcla de globalización, desregulación y digitalización. Si Ud. es exitoso corre más riesgo porque buscan oportunidades y son invisibles hasta que se deciden a actuar.

Ud. puede estar a punto de ser atacado, de desaparecer y ser el último en enterarse.

Internet como red es neutral para el bien o para el mal. Se trate de individuos o empresas, un operador digital puede aniquilar en instantes el producto de su vida de trabajo.

Morir con las botas puestas. La resistencia al cambio es un error compartido. Hacerse el distraído, no observar la dirección hacia la que apuntan las nuevas fuerzas del mercado, tomar pequeñas precauciones cuando lo que se viene es un huracán, mirar el futuro por el espejo retrovisor del auto, implica quedarse del lado equivocado de la historia. Siendo contemporáneo con la revolución, Ud. puede cruzar el puente para seguir siendo protagonista y para sostener los ideales y valores que desea preservar.

A mí no me va a pasar. El conservador se refugia detrás de los clientes alegando que la gente no está preparada o hace pequeños cambios para que nada cambie, como tener un e-mail o una página web estática, y luego dice: a mí nadie me compra por internet.

Secretos del mundo digital. La estrategia digital es mucho más. Se trata de cambiar en serio, de aprender a destruirse antes que otros lo hagan por Ud., de vender sus activos antes de su depreciación. En el mundo digital los activos son pasivos, como las impresoras para quien edita libros electrónicos, o sus edificios para una escuela virtual.

Japón, sin recursos después de la guerra, aplicó la destrucción creativa a los productos americanos que importaba, lo que fue la base de su despegue internacional.

Hoy, como el ataque se dirige a su cadena de valor es necesario adelantarse suprimiendo intermediarios los que en todos los ramos son una especie en extinción por la interactividad creciente entre productores y compradores.

Podrá crecer asociando a sus clientes en comunidades de valor afines a su actividad. Netscape tuvo su boom regalando su navegador. Ud. puede obsequiar información y servicios para incrementar un activo perdurable: su marca.

Para lograrlo deberá incorporar comercio electrónico, intranet, multimedia, etc.; ya que la tecnología no solo posibilita el cambio, sino que lo crea provocando el efecto en cascada de la innovación. Para liderar, la clave está hoy más que nunca en la capacitación.

Salió al balcón. ¿Qué ocultaba ILVEM? ¿Por qué una publicación en futuro? ¿Y qué tenía que ver Cherry? Era claro que no tenía miedo. Más de un influencer había llegado a cerrar todas sus cuentas con tal de protegerse, pero no ella. El following del canal de los Cheviis crecía cada vez más y Javier le estaba produciendo un canal de youtube y un disco de pop peruano de su propio bolsillo.